El informe sobre el turismo mundial del año 2009 realizado por el Foro Económico Mundial indica que España ha cedido una plaza en el ránking mundial de competitividad con relación al año anterior, situándose en el sexto puesto por detrás de Suiza, Austria, Alemania, Francia y Canadá.
En la rueda de prensa de presentación del informe, en la sede de la escuela de negocios ESADE, la co-editora del estudio y economista sénior del Foro Económico Mundial, Irene Mia, ha destacado como aspectos negativos del sector turístico español la poca competitividad de los precios, el nivel de seguridad y las normativas que regulan el sector.
Por su parte, los aspectos más competitivos del sector son los recursos culturales y las infraestructuras turísticas de España. El informe del Foro Económico Mundial analiza los factores que facilitan el desarrollo del turismo en 133 países, mediante diferentes encuestas, en las que se evalúan los países en tres distintas categorías.
Las tres categorías de análisis son el marco regulatorio del sector -por ejemplo si hay restricciones de inversión extranjera-; el ambiente de negocio e infraestructura del sector -la calidad de las infraestructuras turísticas-; y los recursos culturales, naturales y humanos del sector.
En la clasificación de competitividad turística del año 2009, las tres primeras plazas no variaron respecto al año anterior: Suiza, Austria y Alemania siguen siendo los países más competitivos.
Los avances más significativos del ránking han sido los de Francia, que ha pasado de ocupar la décima posición en 2008 a la cuarta en 2009, y de Canadá, que ocupaba la novena en 2008 y la quinta este año.
Tras España, que se encuentra en el sexto puesto, se encuentran Suecia, Estados Unidos, Australia -que ha bajado de la cuarta posición a la novena- y Singapur, que ocupa la décima posición.
Quinta posición en recursos culturales y naturales
Según ha explicado Irene Mia, España no ha reducido su puntuación en la clasificación de 2009, pero otros países como Francia y Canadá, que superan a España, han aumentado considerablemente sus calificaciones con relación a 2008.
De las tres categorías del informe, España ocupa la posición 29 a nivel mundial del marco regulatorio, el puesto 8 en el ambiente de negocio e infraestructuras, y la posición número 5 en recursos humanos, naturales y culturales.
Las principales desventajas del sector turístico español son la competitividad de los precios, en la que ocupa el puesto 96, las regulaciones de apertura de negocios en el sector (posición 74), o la seguridad del país (puesto 66), afectada especialmente por el terrorismo, o el nivel de conexiones áreas (puesto 84). En cambio, en el índice de recursos culturales y en el de infraestructuras de turismo España ocupa la primera posición mundial.
El turismo ‘low cost’ no ayuda a la sostenibilidad
Asimismo, España ocupa la cuarta posición en el índice de priorización del sector, dado el «fuerte enfoque del gobierno», que se traduce en un alto nivel de gasto público en turismo, según ha señalado la co-editora del informe.
El estudio valora la riqueza cultural del país, con numerosos emplazamientos que han sido declarados Patrimonio de la Humanidad, su gran numero de ferias y exposiciones y la gran cantidad de habitaciones de hotel y de empresas de alquiler de coches.
Irene Mia ha señalado que el desarrollo del modelo de sol y playa español no ha sido sostenible con el medio ambiente en el pasado y que el actual turismo de bajo coste no mejora esta situación. EFE