La compañía irlandesa Ryanair, la mayor de las aerolíneas low cost, podría empezar a cobrar a los pasajeros por usar el servicio, según ha comunicado la empresa.
“Nos estamos planteando poner un candado a la puerta del lavabo y que se abra cuando se introduce una moneda”, explicó la compañía a la BBC.
La semana pasada Ryanair anunció su intención de cerrar todos los puestos de facturación en los aeropuertos para obligar a la gente a facturar vía Internet.
“Estamos buscando nuevas vías de financiación para seguir manteniendo precios competitivos” asegura un portavoz de la empresa.
Es lo que tienen las compañías de vuelos baratos
